Hoy en día estamos acostumbrados a las presas de grandes proporciones, pero en 1922 la cosa no era tan así. La modernidad y el desarrollo de las tecnologías hicieron que el humano pudiera controlar las fuerzas de la naturaleza para su beneficio propio, comenzando una carrera mundial para ver quién podía crear la maravilla de la ingeniería más sorprendente de todas. La Presa Hoover sin duda fue una de ellas. Ésta es una presa de hormigón de arco-gravedad que se construyó en el río Colorado, justo entre los estados de Arizona y Nevada, en Estados Unidos.
En un comienzo se le llamó presa de Boulder, pero en honor a Herbert Hoover, quien jugó un papel fundamental en el proyecto (como secretario de comercio y después como presidente de EE.UU.), se decidió llamarla Presa Hoover.
En esos años, el suroeste de los Estados Unidos estaba creando una alta demanda de luz y electricidad. Al mismo tiempo el río Colorado había provocado inundaciones y otros problemas, por lo que se hizo necesario tomar medidas para controlarlo. Los encargados hicieron estudios y finalmente se decidió el lugar donde construir la presa. El congreso autorizó su construcción el año 1928 y los trabajos comenzaron en 1931.
Durante esos años se vivió la Gran Depresión. Miles de obreros viajaron con sus familias al sector en busca de trabajo y acamparon en los terrenos aledaños esperando integrar el grupo de los 5.251 hombres contratados. El primer paso fue desviar el río lejos del sitio de construcción. Para ello se instalaron varios kilómetros de túneles que permitieron dirigir el cauce hacia otros sectores.
La construcción comenzó: se quitaron cientos de miles de toneladas de sedimentos y de rocas para llegar a una base sólida donde instalar las fundaciones de la presa. La estructura de los muros fue tomando forma, pero estaba el riesgo de que las paredes del cañón se resquebrajaran y fueran un riesgo grave. Por ello, algunos de los trabajadores tomaron el cargo de “high scalers”. Lo que hacían era trepar por los murallones haciendo que las rocas sueltas cayeran; también las golpeaban con martillos para cualquier cosa que tuviera que desprenderse, lo hiciera. Este era un trabajo peligroso, las piedras sueltas podían golpearles la cabeza y provocar graves accidentes. Ellos, como medida de protección, sumergían sus sombreros en alquitrán y luego los dejaban secar hasta que se pusieran duros. De esta forma tenían cascos resistentes que los protegían de deslizamientos menores.
En junio de 1933, se comenzó con la etapa de poner hormigón en la estructura. Las reacciones químicas que se producen durante el endurecimiento del hormigón generan altos niveles de calor. Los ingenieros estiman que si toda la presa hubiera sida construida como un solo gran bloque, habría tomado 125 en enfriarse (provocando su colapso).
Para no tener este problema, el concreto fue dividido en varios bloques rectangulares llamados “lifts”, que luego eran enfriados por cañerías llenas de agua helada. Este proceso terminó en mayo de 1935, habiendo utilizado aproximadamente 3.25 millones de yardas cúbicas de concreto, lo suficiente para pavimentar una carretera de Nueva York a San Francisco.
Existe el mito de que hay cientos de cuerpos de obreros dentro de esas paredes de hormigón, sin embargo, eso está basado solamente en rumores. Oficialmente hubo 112 muertes que fueron resultado de los trabajos en el proyecto. El primero fue J.G. Tierney, un topógrafo que que se ahogó mientras buscaba un lugar para construir la presa.
La presa fue terminada el 30 de septiembre del año 1935. El presidente de ese entonces, Franklin D. Roosevelt, asistió al lugar y lideró la ceremonia para aplaudir el gran trabajo hecho. Un año después comenzó a funcionar la planta hidroeléctrica que abasteció de electricidad a los estados de California, Nevada y Arizona.
En 1947 se le puso el nombre de Presa Hoover. Para ese tiempo era la estructura artificial más grande del mundo. Su efecto produjo la creación del lago Mead, el mayor de todos los Estados Unidos.
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Por Ignacio Mardones
Visto en: www.upsocl.com
SCHENECTADY MUSEUM; HALL OF ELECTRICAL HISTORY FOUNDATION/CORBIS
Comments (20)
Alfredo Espinosa - 22 septiembre, 2015
Interesante, Reseñas como ésta, con fotografías que por si solas valen mucho, enriquecen el conocimiento de quien tiene la fortuna de leerlas. Saludos¡¡
Carlos Reza - 23 septiembre, 2015
Es impresionante lo que el hombre puede hacer, con estas obras de ingeniería se reafirma el poder de la raza humana para beneficio de ella misma y no para su destrucción , como sucede con las construcciones que sirven para aniquilarse produciendo armas de guerra. Mis respetos para esos ingenieros que diseñaron y llevaron a cabo esta megaobra de Ingeniería.
Walter Novales - 24 septiembre, 2015
Proyectos como este inspiran a mejorar día con día en el desempeño de la profesión.
Excelente reseña historia y las fotografías a pesar del tiempo muy claras.
saludos.
ANGEL - 27 septiembre, 2015
MUY BUEN ARTICULO
Ian - 5 octubre, 2015
Sencillamente espectacular, la ingeniería desde tiempos antiguos en su máxima expresión sin la necesidad de la tecnología de hoy en día. Todo depende de nosotros y en nuestras ganas de investigación.
Jaime - 6 octubre, 2015
Excelente información. Gracias por compartir.
juan jose - 17 octubre, 2015
Es tan maravillosa el proceso de construcción como el hecho de que se hicieron los cálculos prácticamente a mano, sin calculadora no el software que hay hoy en día. Eran grandes los ingenieros de esa época.
luis silva - 23 octubre, 2015
Es una obra de ingenieria magnifica estuve por esa el 2002 y es impresionante,magnifica y un orgullo de la Ingenieria,fabuloso.
bryan - 15 marzo, 2016
Es inimaginable pensar en todos los problemas que debieron haber pasado pero al final la recompensa en inmensa ese gran esfuerzo humano que sirve como ejemplo de lo que podemos hacer.
Abilio - 29 mayo, 2016
Impresionante , gracias por compartirlo.
Isabel Sirpa Ramirez - 5 junio, 2016
Esa monumental estructura es Un homenaje a quienes como obreros fallecieron para lograrlo y que hoy actualmente los estadounidenses puedan servirse de ello hoy en dia ….
Hansell Araya v. - 27 agosto, 2016
Es impresionante ese tipo de obras y en esos tiempos remotos donde se carecía de tecnologías para el desarrollo de mega estructura como esa,mis respetos para esos ingenieros que la diseñaron. En Costa Rica tenemos un puente que sufrio un daño en la losa de rozamiento y tienen como 6 años tratando de arreglarla y eso que es como 10m2 deberian de pedir ayuda alos ingnieros antepasados .jajaja
Roberto Chavez - 20 junio, 2017
excelene historia no cabe duda que esto es interesante!!
ademas las imagenes muy buenas!
RAÚL SALAS RICO - 27 diciembre, 2017
La Presa Hoover es un ejemplo de la capacidad de planeación de la infraestructura. INGENIERÍA FOREVER!
Levi Salazar - 10 marzo, 2018
Qué coool:0
Mario - 9 julio, 2018
Fantastico. Genial la creacion del hombre.
alejandro gimenez - 11 noviembre, 2018
Muy buen material fotográfico, en la facultad nuestro Ingeniero Docente en Hidrología y obras hidraulicas, nos habló mucho de estas como de otras obras que culminaron en desastre. La Ingeniería es importante para el crecimiento de una sociedad, mas no debemos olvidar nunca que la que tiene la ultima palabra es nuestra madre NATURALEZA.-
José Salas Fuentes - 11 noviembre, 2018
Una maravilla de la ingeniería
Ing Manuel Muñiz - 5 mayo, 2019
Este tipo de reseñas/documentales son los q verdaderamente hacen vislumbrar el aspecto ingenieril q todos los colegas llevamos dentro.
Max Chavez - 19 agosto, 2020
La presa Hoover contemporáneo a la presa Grand Coulee son iconos de la ingeniería mundial y han sido los pilares del desarrollo mundial.
Los planos de ambas presas son muy similares a los planos elaborados por el sabio peruano Santiago Antunez de Mayolo cuando hizo los estudios de la Central del Pongo de Manseriche (4000 MW), recordemos que SAM estudió en Francia pero estuvo en los EE.UU., lamentablemente el primer estudio que realizó en el 1913 referente a la hidroelectrica del Cañón del Pato se pudo inaugurar el año 1958, es decir casi medio siglo después, por la incomprensión de los gobernantes que no tenían la visión del desarrollo, igual el Pongo del Manseriche sigue esperando.