Proyecto Venus: ¿La ciudad del futuro o sólo una utopía?
Yo veo a las ciudades del futuro no como un problema de arquitectura, sino como un problema social y económico”. Esta es la visión de Jacque Fresco, ingeniero estadounidense que en 1995 creó la Fundación Future by Design y el Proyecto Venus. Este último abarca conocimientos de arquitectura, sociología, ingeniería y ciencia, para defender la teoría sobre cambiar el comportamiento humano y dirigirlo hacia una cultura que se desarrolle en armonía con la Tierra.
A continuación, ¿Qué es el Proyecto Venus?
La construcción de ciudades a partir de cero -mientras se re-acondicionan las ya existentes y “deterioradas”- y la sustitución del sistema monetario por una economía basada en los recursos; constituyen la teoría sin precedentes de Fresco, quien ha sido bautizado por algunos como “el Da Vinci de nuestros tiempos”. En 2003 para el programa “Redes” de TVE, el ingeniero social, diseñador industrial y futurista de 96 años, explicó su concepción del futuro: “la ciudad debe ser un sistema autosuficiente similar al cuerpo humano. Debe poder regenerarse y debe generar suficiente energía para que funcione. La ciudad debe estar controlada por ordenadores. En las ciudades del futuro, con inteligencia interna, las ciudades podrán pensar, prepararse a sí mismas, mantenerse y ponerse al día así mismas basándose en la razón, los descubrimientos y la tecnología y metodología”.
Según el Proyecto Venus, las urbes del futuro serían construidas con las técnicas y los recursos disponibles más sofisticados y utilizando energías limpias. Esto se condice con el objetivo de que una ciudad sea circular -lo que implica que sea pensada con anterioridad y no construida sobre la marcha, como las ciudades actuales-, pues, según Fresco, esto obedece a la necesidad de generar el mayor nivel de vida posible; factible sólo si se está en armonía con la naturaleza. Uno de los beneficios concretos que propone este tipo de diseño urbano, consiste en un transporte público a través de trenes de alta velocidad, el cual resultaría más eficiente para todos los ciudadanos, y en el que los automóviles -livianos y consumidores del mínimo de energía- tendrán sensores electrónicos para prevenir choques.
EXTRAIDO DE: http://www.plataformaurbana.cl/