El tomar decisiones o adelantarnos a los hechos no es nada saludable. Debemos contar con todos los datos que podamos obtener de la información. Veamos el siguiente caso:
En un aeropuerto de una de las ciudades de la antigua Cortina de Hierro, un espía huía de la policía secreta rusa, la KGB. Estaba a punto de ser capturado, cuando, súbitamente, tropezó con una monja a la que le pidió que lo escondiera bajo su hábito. Los agentes de la KGB preguntaron a la religiosa si había visto al espía y le dieron su descripción. Ella les informa que no lo había visto. Cuando ya el peligro había pasado, el espía salió de debajo del vestido de la monja y se inició el siguiente diálogo:
-Gracias, hermana, por haberme salvado de ser capturado por la KGB.
-Ha sido con mucho gusto, hijo.
-Tengo que decirle, hermana, que usted tiene unas hermosas piernas. ¿Se dio usted cuenta del besito que le di en las pantorrillas?
-Claro, hijo.
-¿Sintió usted los besitos que le estampé en las piernas, antes de las rodillas?
-Sí, hijo.
-¿Notó cuando fui subiendo y le cubrí las piernas de besos, arriba de las rodillas?
-Sí, hijo.
-¿Qué hubiera sucedido si yo sigo subiendo, y subiendo y llenándola de besos?
– ¡Pues que me hubieras besado los @#$%&Ç , cab@#$%&()! ¡Yo también soy un espía!
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Este de seguro no era ingeniero…
Un ejecutivo y su secretaria empezaban a tener una relación amorosa, y el ejecutivo la convenció de que pasaran el fin de semana en su casa.
-No te preocupes… le dijo. -Mi esposa está fuera de la ciudad en un viaje de negocios y no nos molestará.
Ya estaban los dos desnudos en el dormitorio del ejecutivo, cuando la secretaria dijo: -¡No podemos hacerlo! No estoy usando ningún anticonceptivo.
-No hay problema… dijo él. -Sé donde guarda mi esposa su diafragma.
De inmediato comenzó a buscar en el baño. Después de media hora, regresó al dormitorio hecho una furia.
«¡Esa maldita! Se los llevó consigo. ¡Siempre supe que no confiaba en mí…!
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Se encontraba Juan trabajando, cuando les informan que al siguiente día les practicarían un examen anti-doping en el trabajo. Preocupado porque pudiera salir positivo va a su casa y le pide a su padre que orine en el recipiente, después va con su madre y su hermana y les pide lo mismo, hasta su perra colaboró con su muestra de orina, al final puso algo de la suya también.
El día del examen entrega la mezcla de orina de la familia.
A la semana en el trabajo los forman a todos en la puerta del jefe, y el los hace pasar de uno por uno. Al primero solo le dijo, está despedido, al segundo, siga trabajando, al tercero, está despedido, y así sucesivamente, dependiendo de la persona.
Pero cuando entra Juan le dice, ¡Felicidades!, y el muy animado contesta:
– ¿Me va a dar un aumento?
– No.
– Entonces ¿por qué me felicita? –
Porque va a ser tio, su hermana está embarazada, además su padre esta diabético, su mamá está menopáusica, su perra en celo y usted está despedido.
Comments (3)
Ezequiel - 6 noviembre, 2011
Saludos ERIC.
Muy bueno el de la monja espia :D!
Marcos - 8 noviembre, 2011
Muy buenos los chistes. Mis saludos Eric.
terry - 17 noviembre, 2011
muy bueno el chiste
mias
reapetos