Resaltos reductores de velocidad en calles de Latino América

Hace  un par de días estaba investigando acerca  de la implementación de los resaltos como reductor de velocidad en nuestras calles, el denominador común que he encontrado hasta ahora es la disconformidad de los conductores. Estuve hablando con algunos amigos acerca de su impresión de acuerdo al tema de los resaltos y unos más conscientes que otros me contaban que estos dispositivos eran capaces de prevenir muchos accidentes de tránsito   y otros no ocultaban el odio que sentían hacia los resaltos o “policías muertos” como son mejor conocidos en Panamá; el tema de los nombres es algo muy curioso porque son tan populares en Latinoamérica  que cada país les conoce  de una manera diferente( lomo de burro, policías acostados, túmulo, badén, rompemuelles, tope ect.), lo común es que  en la mayoría de los países la gente tiene algo en contra de los resaltos y con justa razón.

La implementación de  elementos reductores de velocidad comienza en los años 60 en Holanda  con lo que hoy se conoce como “Traffic Calming”, bajo este concepto se implemento la primera medida para obligar a los conductores a disminuir la velocidad y se trataba justamente de un resalto, luego se fue extendiendo por Europa, Australia, Estados Unidos, Canadá y el resto de países de Latino américa donde se ha convertido  en una aparente solución ante el problema del exceso de velocidad, y digo aparente porque el tema se ha llevado tan a la ligera en muchos países que lejos de ser una solución viable parece convertir las calles en un verdadero infierno de repente estoy siendo muy dramática, pero  no puedo negar mi inconformidad ante la proliferación de resaltos que invaden muchos países de América,  el abuso de estos dispositivos realmente da un muy mal aspecto a la ciudad, tan solo imagínense que se puede pensar de una ciudad invadida en resaltos, a la única conclusión que puedo llegar es que es una ciudad plagada de conductores salvajes.

El punto que les quería comentar es acerca de la cantidad de daños versus  los beneficios  que estos dispositivos pueden generar en una vía,  a continuación les menciono algunos de los mas comunes.

PRO

• Es indudable que la instalación de un resalto en una vía obliga a los conductores a disminuir la velocidad, si el conductor no baja la velocidad por su cuenta, al chocar con el resalto forzosamente se reduce la velocidad del vehículo.
• Ligada al primer punto, en vista a que obliga a disminuir la velocidad, evita accidentes de tránsitos.

CONTRA

• Dañan la suspensión, balance, cárter de un vehículo; de daños en automóviles no puedo opinar mucho, pero  por esta razón los resaltos están entre los más odiados por los conductores, mas cuando se trata de la incomodidad generada por un resalto mal diseñado o construido  que  provocan una cantidad de daños en los automóviles que terminan en un gran gasto para el conductor.
• Los resaltos nos afectan a todos por igual, desde el conductor desordenado hasta al más apegado a las leyes de tránsito y más cuando se trata de vehículos de emergencia como bomberos, policías, ambulancias ect. esta ultima siendo la más crítica, sino imagínense un paciente en estado delicado y el estrés de atravesar un resalto.
• Son un peligro para bicicletas y motocicletas, al chocar contra estos la tendencia es hacer perder el control y provocar accidentes.
• Aumentan la contaminación, el ruido y el consumo de combustible.

El desorden con esto de los resaltos muchos veces se genera a expensas de una normativa que los regule, estuve revisando material de varios países y  aun hay países que no cuentan con un reglamento , norma o similar que regule estos dispositivos en las calles, hay otros que si poseen cierta documentación como el caso de Perú que posee un documento exclusivamente de resaltos y el caso de Brasil que posee un  completo Manual de Traffic Calming, que es a donde deberían enfocarse el resto de los países que buscan mantener vías seguras, mas cuando la O.N.U ha pedido a sus países miembros promover durante estos próximos diez años la seguridad vial, como dato curioso se estima que al menos 3000 personas mueren a diario en accidentes de transito muchas veces relacionados con el exceso de velocidad y es una cifra que debe y puede disminuir.

Por otra parte, recordemos que  la construcción de una vía  justifica su costo con los beneficios que esta vía brindara a las personas que por ella transitan, pero al colocar estos dispositivos sin ningún control  y sin ninguna norma que respalde su diseño, construcción y mantenimiento exponemos a que la vía se convierta en una generadora de costos en vez de beneficios de igual forma tenemos que tomar en cuenta que el diseño de una vía y cualquier otro elemento que sea parte de esta , debe contemplar la vulnerabilidad del cuerpo humano, la cual es un parámetro determinante en el diseño de los sistemas  de tránsito.

Saludos, y agradezco sus comentarios  ya que aún me encuentro trabajando en esta investigación.