CUARTA FICHA DE AUSCULTACIÓN ESTRUCTURAL – DEFECTOS EN ELEMENTOS METÁLICOS

La principal idea de generar unas fichas para la toma de datos en obra es la de no olvidarse de recavar toda la información necesaria; en ese sentido hay que generar una ficha adecuada a los elementos que vamos analizar, en esta ocasión veremos una dedicada los elementos metálicos.

Por favor no olvidemos colocar el código del Proyecto, nos evitará la pérdida de tiempo.

Primero, como siempre, será identificar el elemento sobre el cual vamos a recavar los datos; por tanto como en casos anteriores incluiremos su función estructural, su situación, dimensiones, tipo de apoyos, y en este caso los espesores reales del elemento en cuestión, alas, alma, rigidizadores si los tuviese, pernos y tuercas o bulones según sea su caso.

Es evidente que calibre o pie de reyserá el instrumento que utilizaremos con mayor profusión, ya que las medidas en el caso de estructuras metálicas deben tener precisión milimétrica; además esto nos permitirá identificar en el caso de estructuras antiguas algunos perfiles que evidentemente no estén normalizados, ya sea por su edad de fabricación o por la ausencia de control en la misma.

 Los elementos estructurales metálicos al contrario que los elementos de hormigón suelen ser de poco espesor, por lo que la corrosión puede producir un gran efecto en la baja de resistencia de un elemento metálico, por lo que tendremos que reportar lo mejor posible el estado del emento respecto de este particular, definiendo su estado y ubicación.

A continuación tomaremos, con el calibre igualmente, los datos correspondiente a los espesores de garganta, no hay que olvidar que el clásico “más es mejor” no se da con la soldadura, ya que esta debe estar siempre adecuada a los espesores de las secciones que une. También tomaremos nota de los posibles defectos que presenten las soldaduras, fisuras, poros, exfoliación, escorias, para lo que nos será muy útil en determinados casos una lupa y la linterna, la variación de los haces de luz sobre la soldadura permite apreciar mejor sus defectos a simple vista.

A continuación tenemos un recuadro para definir específicamente el Estado del Defecto concreto del elemento que nos ha hecho analizarlo, donde podremos especificar el estado de dicho defecto.

Evidentemente un dato importante en los elementos metálicos son las deformaciones que pueda presentar, como flechas, torsiones, pandeos locales del ala o del alma; que además suelen ser muy notorios en los elementos metálicos por sus pequeños espesores.

Otro dato que no podemos descuidar es el estado general de conservación y protección del elemento metálico, y sobre el cual siempre es conveniente dar nuestra primera impresión, aparte de los datos numéricos ya que esto contribuirá en gran medida a nuestras conclusiones. En este sentido hemos de recordar que no es conveniente que las estructuras metálicas estén en contacto con elementos o recubrimientos de yeso o escayola, ya que el gran poder de absorción de humedad de estos materiales suele ser un foco de corrosión.

No hay que olvidarse siempre de anotar cualquier cosa que nos parezca “extraña” o “reseñable” en nuestra auscultación, toda información es válida, ya que nos permite refrescar la memoria sobre la escena de la patología. En el caso de las estructuras metálicas es muy importante el referir la temperatura y la humedad que detectamos, ya que son estructuras propensas a las condensaciones y este es otro foco de corrosión por oxidación.

Por cierto algo que nunca deberemos de olvidar es hacer fotos globales y de detalle de los puntos conflictivos, soldaduras, revestimientos, pandeos locales, corrosión, apoyos, anclajes, etc, así podremos contrastar los datos escritos con las imágenes. No olvidarse de lo más importante en una cámara, las baterias y la tarjeta de memoria o el carrete de fotos para los tradicionales.

En el próximo post, veremos algo de instrumentación…