En zonas urbanas y áreas donde la construcción de líneas áreas de alta tensión es difícil, debido a las condiciones medioambientales, impacto visual o la servidumbre forzosa que implican, las líneas subterráneas de alta tensión se han convertido en una pieza clave de la infraestructura eléctrica.
En el pasado, el alto coste de los cables subterráneos impidió su uso. Sin embargo, la disminución de costes de producción y el aumento de su fiabilidad están haciendo que sean cada vez más competitivos respecto a las líneas aéreas, y que cada vez se esté considerando más su utilización.
Además de su reducido impacto visual, los cables subterráneos ofrecen menores costes de mantenimiento que las líneas aéreas y, al estar hechos de cobre, las pérdidas de potencia son un 30% menores respecto a las líneas aéreas, en las que los conductores son de aluminio-acero.
El avance en las técnicas de análisis y diagnóstico de faltas en cables aislados nos permiten hoy en día encontrar y reparar los cables aislados mucho más rápido que en el pasado.
El uso de nuevos materiales, como el aislamiento mediante polietileno reticulado, ha permitido que los cables subterráneos de alta tensión tengan una sección menor y mayor flexibilidad; esto implica que se puedan fabricar en tiradas más largas, con la consecuente reducción de uniones de cables y, por tanto, de costes.
El uso de perforadoras en el tendido de cables nos permite evitar perforaciones a cielo abierto en situaciones en las que la infraestructura existente o las condiciones ambientales lo impiden.
Una vez que los cables aislados han terminado su vida útil, el conductor puede ser reciclado y el aislamiento puede ser aprovechado, con la consecuente reducción de impacto medioambiental.
En cuanto a la garantía de suministro, las fallas en líneas aéreas suele deberse a caídas de árboles sobre las líneas, condiciones meteorológicas extremas, accidentes con vehículos y aeronaves, y el contacto directo de las personas.
Las principales causas de fallos en cables subterráneos han sido históricamente las condiciones de humedad y los fallos en las uniones de cables, pero la mejora en las técnicas y materiales han reducido su incidencia.
Enlaces de interés
- Norma para redes subterráneas EPM Colombia
- Diseño de líneas de transmisión subterráneas México
- Normas particulares y condiciones técnicas y de seguridad España
Autor: Guillermo Nuñes González, docente en la Maestría en Ingeniería Eléctrica aplicada de EADIC.