Hormigones y morteros autonivelantes

Uno de los problemas más frecuentes es la colocación adecuada del concreto o mortero sin que se produzcan oquedades excesivas, segregación, etc.  A veces cuando desencoframos se ven los pedazos de árido grueso que con solo tocarlos con los dados se separan. El resultado es un elemento estructural no apto para realizar sus funciones.

Muchos dirán: Hay que compactar el hormigón, pero en algunas ocasiones no se cuentan con los medios adecuados. Por ejemplo un topping armado de 5 cm sobre una losa existente sería imprudente vibrarlo con un compactador tipo aguja.

En  otros casos como es el de los bloques al verter el hormigón el espacio entre el  refuerzo y las paredes del bloque no permite la vibración mecánica además del peligro de hacer peligrar la adherencia del concreto ya vertido (Con más de 45 min.).

Existen otros casos en trabajos menores como colocación de pernos de anclaje o en trabajos mayores como colocación de concreto a grandes alturas donde tampoco es prudente el uso de vibradores por dificultoso.

En todos estos casos la alternativa es usar mezclas fluidas, prácticamente sin asentamiento. Si aumentamos el contenido de agua sacrificaremos la resistencia  final, pero con el uso de reductores de agua y superplastificantes lograremos hormigones que se autocompactaran sin segregar los áridos   a los cuales la estructura molecular del aditivo facilita su amortiguamiento y  la expulsión del aire ocluido sin medios mecánicos.